Con la nueva película del director Andrew Sala, ‘La barbarie’, asistimos a un conflicto familiar donde Nacho, de 18 años, huye de la violencia de su casa de Buenos Aires en busca de un hogar al amparo de su padre a quien apenas conoce.
En el coloquio posterior a la presentación de la cinta, presentada en el marco de proyecciones de la sección Málaga Premiere, su director, acompañado del actor protagonista Ignacio Quesada, han explicado la génesis de la película y las complicaciones interpretativas a las que se enfrentó el joven actor. Andrew Sala ha manifestado que el orígen de la historia surge de la separación y el dilema de los conceptos civilización y barbarie, a partir de la obra del escritor Domingo Faustino Sarmiento. El director, explora la idea iniciada en el siglo XIX sobre la mirada de las ciudades hacia Europa como sinónimo de civilización.
La película juega con las dos ideas y obliga al espectador a plantearse qué es barbarie y qué es civilización. En palabras de Sala, la película ofrece varías lecturas sobre qué es considerado barbarie, y todavía hoy se extrapola el concepto a un eje social como el maltrato a las mujeres o la relación social con los animales, tan diferente en el mundo rural.
Por su parte el actor Ignacio Quesada ha manifestado la complejidad que le supuso interpretar a su personaje por la crudeza del lugar, el rechazo vivido por su personaje y la cantidad de estímulos que la interpretación de Nacho le ofreció en este rodaje.
‘La Barbarie’ participó en los laboratorios de desarrollo de guión organizados por la zona de industria del Festival de Málaga, MAFIZ, gracias a la cual consiguió parte de la financiación para completar el proyecto. Salas ha agradecido la oportunidad al Festival de Málaga sin cuya ayuda ‘hubiera sido muy difícil de llevar a cabo’.