La Biznaga del Festival de Málaga protagoniza la exposición que el Ateneo acoge con motivo de MaF 2021
La muestra colectiva ‘647 biznagas’ rinde homenaje desde el viernes 14 a este galardón, creado por Antonio Herráiz y Cayetano Romero
A partir del viernes 14 (inauguración a las 19.30 horas) podrá visitarse en el Ateneo de Málaga la exposición colectiva ‘647 biznagas’, dentro de MaF – Málaga, la antesala cultural del Festival de Málaga. La Biznaga, premio que representa la respiración de una ciudad y que recoge el espíritu del Festival de Málaga; un certamen abierto, mediterráneo, inclusivo y cosmopolita, cumple dos décadas entre nosotros. Nuestra biznaga, creada por Antonio Herráiz y Cayetano Romero, se ha multiplicado 647 veces desde el año 2001 hasta hoy; con todas ellas, se han premiado películas que ya forman parte de nuestra educación sentimental y de la época dorada del cine español.
Con este espíritu nace esta exposición colectiva, que no solo busca rendir homenaje a la obra original y sus creadores, reivindicando así el papel de artistas y diseñadores en la construcción del patrimonio de nuestra ciudad, sino que tiene como principal objetivo revisar la contemporaneidad de este galardón que en su día no estuvo exento de polémica al utilizar como imagen del trofeo un elemento que, precisamente por estar muy asentado en la propia idiosincrasia de la ciudad, estaba también inevitablemente cargado de tradición, simbología y usos diversos.
MaF 2021, que se celebra desde mañana jueves 13 de mayo hasta el jueves 3 de junio, está conformado por 135 actividades con las que se pretende celebrar la cultura con el cine como argumento, al tiempo que se piensa la realidad que atravesamos a través de dicha programación. La distancia y la sostenibilidad son los ejes discursivos de MaF 2021 y es este primero, el de la distancia, entendida como memoria, como camino recorrido hasta llegar a nuestro presente, el que centra esta exposición.
Darko, Martín de Arriba, David Escalona, José María Escalona, Noelia García Bandera, Vicente Holgado, Chema Lumbreras, Victoria Maldonado, Sebastián Navas, Marta Retamero y José Seguiri son los artistas que reinterpretan la biznaga para esta muestra.
La idea de hacer de la tradicional biznaga malagueña el motivo con el que se va a desarrollar el trofeo del Festival nace dentro del propio equipo del certamen, que en el año 2000 dirije Salomón Castiel. El proyecto se le confía al estudio de Antonio Herráiz, que en ese momento estaba diseñando la imagen del festival, y que incorpora al equipo al artista Cayetano Romero, quien entre otras cosas va a dar corporeidad a las propuestas que en el estudio van a ir surgiendo. Algunas de estas propuestas y en concreto la más cercana al diseño final de la Biznaga, estarán ilustradas por Alberto Villén, quien en ese momento forma parte del equipo de creativos del estudio.
La primera idea fue hacer un trofeo que aunara la biznaga y el mar, identificando a este con perlas marinas ensartadas en agujas de metal de oro o de plata, del mismo modo que se colocan en la biznaga malagueña. La presentación se idea en un estuche, dándole al trofeo un carácter cercano a una joya. Se mantenía así toda la delicadeza que era consustancial a la flor de jazmines y al mismo tiempo se incorporaba la idea del mar que como ciudad costera que es Málaga, parecía indispensable. La propuesta no se lleva a cabo, pues se le quiere dar al trofeo un carácter más rotundo y escultórico, un galardón que se pueda asir sin elementos anexos, elevar por encima de las cabezas con el tradicional gesto del premiado y también, por qué no, abrazar y besar.
Conceptualmente, el reto era luchar contra lo tópico y folclórico como representación de lo que evidentemente había sido usado con anterioridad bajo esos aspectos. Formalmente, la complejidad la aportaba la estructura formal de la biznaga, mantener en un formato sólido y volumétrico unas formas cuyas características intrínsecas eran sobre todo lo grácil, lo etéreo y lo efímero, entre otras cosas. La solución fue diseñar un soporte trapezoidal sobre el que descansaría la esbelta forma de la biznaga. La base más ancha que el cuerpo permitiría prescindir de la peana y al mismo tiempo dotaba a la figura de estabilidad sin restarle gracia.
El prototipo fue modelado en arcilla roja en dos fases. En la primera, los jazmines que componen la biznaga están esquematizados en pequeños volúmenes cúbicos. Sobre este modelo se investigó, desarrolló y se corrigió todos los detalles ergonómicos que en cuanto a su manipulación, el trofeo requería. La segunda fase, una vez concretada la forma y el volumen, consistió en detallar los jazmines acercándolos, sin que llegara a ser una copia mimética, a la copa de jazmines que conforma la biznaga.
El prototipo se coció a 900 grados, convirtiéndolo así en una pieza definitiva de cerámica. La escultura fue llevada a la fundición Magisa de Madrid, donde se le hizo un molde de silicona, para reproducirla en bronce mediante la técnica de fundición a la cera perdida. En el taller de fundición se concretó finalmente los dos tipos de pátinas que se aplicarían sobre los trofeos, una negro-verdosa para la Biznaga de plata y otra de reflejos dorados para la Biznaga de oro.
El 15 de mayo de 2001 se presenta el trofeo a la ciudad. Desde entonces la Biznaga ha servido para reconocer y premiar el talento y la calidad cinematográficos en el Festival de Málaga.
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